Lo necesitamos (al ego) particularmente para amar a los demás, porque necesitamos poder ver al otro como “otro”. No podemos dar ese salto fuera de nuestra propia visión limitada del mundo, a menos que podamos ver al otro como algo distinto a nosotros. Ese es el primer paso. El segundo paso es ver que el otro no está separado de nosotros. Pero necesitamos llegar a esa primera percepción y, por lo tanto, necesitamos al ego, que es el proceso de separación. Necesitamos ese desarrollo del ego, particularmente en esos primeros años, para separarnos del útero, separarnos del pecho, separarnos de la madre y el padre y la familia y los amigos, etc., para poder separarnos. , y llegar a valernos por nosotros mismos, y aprender a ser capaces de asumir el riesgo de ser nosotros mismos. El ego es un proceso psicológico necesario que permite que se produzca esa separación. Es doloroso, es traumático, pero es necesario.
( Aspectos del amor 2 de Laurence Freeman OSB)
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