La atención es amor. Lo que hacemos en la meditación, y no lo uso con un lenguaje piadoso ni sentimental, es amor. Puede que no lo parezca emocio nalmente en ese momento, pero amamos, y los efectos de este trabajo de atención durante la meditación se traducirán en amor en nuestras vidas. Básicamente, nos convertimos en personas más amorosas, capaces de recibir amor. El amor es una vía de doble sentido: dar y recibir.
La gracia en el trabajo por Laurence Freeman OSB
No hay comentarios:
Publicar un comentario